El 1 de julio, cuando estalló el lockout, ni los más pesimistas podrían preveer que, tres meses después y luego de varias charlas, la situación de los contratos de los jugadores más importantes del mundo todavía no se haya destrabado.
Si se busca la palabra en el diccionario, se podría deducir rápidamente que es lo que esta pasando. Así es como la definición de lockout dice "cierre de una fábrica por parte de un patrón o una empresa para obligar a los trabajadores a aceptar las condiciones empresariales". Si se lo quiere aplicar a esta situación, la fábrica sería la liga más importante del planeta, el patrón sería el comisionado de la NBA y los trabajadores podrían ser identificados como estrellas millonarias del deporte. Así más o menos se comprendería todo.
David Stern, comisionado de la NBA.
Es que, a falta de un mes para que empiece el calendario de la temporada, sigue habiendo diferencias entre los jugadores, los directivos de la NBA y los dueños de los equipos. Los principales focos de conflictos son el tope salarial (el máximo sueldo que tienen permitido las franquicias de pagarles a su plantilla anualmente) y, principalmente, el porcentaje de ganancias que recibirán del total recaudado por la NBA. Los jugadores cobraban hasta la temporada pasada el 57% de este monto, y bajaron sus expectativas al 53%, pero los dueños siguen insistiendo en que el porcentaje sea del 47%. Algunos dirán "son sólo 6%, por qué tanto problema?". Es que ese 6% representa más de 200 mil millones de dolares, cifra para nada desconsiderable.
Ninguna reunión ha podido destrabar estas situaciones. Así fue como, a pesar de haber estado por más de 7 hs discutiendo las situaciones el sábado, no se pudo llegar a ningún acuerdo. Sin embargo se habían comprometido a volverse a ver las caras el lunes, donde hubo otro encuentro por más de 4 hs, donde tampoco se resolvió nada. Los jugadores de la NBA se lo toman muy en serio, apoyados por sus representantes. Y en las últimas reuniones muchas figuras han demostrado su consentimiento y participaron de las reuniones: Kobe Bryant, LeBron James, Chris Paul, Carmelo Anthony, Paul Pierce, Ray Allen, entre otros.
Fisher encabeza a los jugadores en las reuniones para resolver el lockout.
Por ahora, los jugadores han tomado diversas posturas acerca de que harán durante el receso. Algunos deciden entrenarse en equipos europeos, otros realizar campañas para divulgar el deporte, otros de jugar en exhibiciones. Pero los que más les duele a la NBA son las figuras que deciden llevar su talento a Europa, firmando con grandes equipos del viejo continente. Es así como ya han emigrado varias estrellas, como Tony Parker, Deron Williams, Andrei Kirilenko o Rudy Fernández. Y los rumores de que se iran varios más no acaban.
Las consecuencias por ahora son muchas. Pretemporada totalmente cancelada, que le significará una perdida de 200 millones de dolares, algunos sponsors que se caen, múltiples despidos y desacuerdos entre los protagonistas. Billy Hunter desalentó a los fans, al declarar "probablemente habrá otra reunión, en uno o dos meses". Así que las esperanzas de que la liga comience en tiempo y forma son muy pocas. En fin, una discusión entre millonarios sobre dinero. No puede llegar a buen puerto pronto. Esperemos que sí.
Saludos a todos!
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